A esta altura de los acontecimientos tecnológicos, es absolutamente seguro que hemos escuchado el término pixel, y quizás también no sepamos con certeza a qué se refiere esta palabra, ya que suele utilizarse en variados escenarios. El término se acuño ya hace varios años para definir al más pequeño de los elementos que conforman una imagen: El Picture Element, de lo cual partió el vocablo, formado por el “Pix” de Picture y el “el” de Element.
El pixel hace posible la idea de hablar de resolución de una imagen, es decir de la calidad que ofrece la misma cuando la visualizamos, y es un hecho que a mayor cantidad de estos elementos, los pixeles, mayor será la resolución de la misma. En el sentido contrario, a menores valores de pixeles, menor la calidad.
¿Qué es un pixel?
Los pixeles forman parte integrante de toda nuestra vida digital, ya que con ellos se miden las resoluciones de las pantallas de smartphones, tablets, monitores, imágenes, gráficos y hasta incluso videos. Cada elemento que vemos en la pantalla de cualquiera de los dispositivos mencionados se conforma de pixeles, como asimismo las pantallas de los mismos. Estos pixeles son la unidad más pequeña de información que compone una imagen, siendo en general de forma cuadrada o circula, dependiendo de lo que estemos midiendo.
Explicado de manera sencilla, cada uno de los pixeles individuales, agrupados de determinada forma, cuando los observamos desde una determinada distancia, forma el conjunto de la imagen completa.
Cantidad de pixeles en las imágenes
Si la cantidad de pixeles que conforman una imagen son pocos, y el tamaño en centímetros de la misma es grande, la definición de la imagen expuesta será pobre, mientras que a mayor número de ellos, la imagen se visualizará mejor, permitiéndole contar con un grado de detalle superior, tanto en los contornos como en el cuerpo de la imagen.
La cantidad de pixeles de una imagen determina el tamaño en bytes que la misma tendrá, es decir que mientras más píxeles posea una imagen, mayor espacio ocupará en el disco duro de nuestra computadora, y por lo tanto, más difícil de manipular será.
Los pixeles forman parte integrante de toda nuestra vida digital, ya que con ellos se miden las resoluciones de las pantallas de smartphones, tablets, monitores, imágenes, gráficos y hasta incluso videos. Cada elemento que vemos en la pantalla de cualquiera de los dispositivos mencionados se conforma de pixeles, como asimismo las pantallas de los mismos. Estos pixeles son la unidad más pequeña de información que compone una imagen, siendo en general de forma cuadrada o circula, dependiendo de lo que estemos midiendo.
Explicado de manera sencilla, cada uno de los pixeles individuales, agrupados de determinada forma, cuando los observamos desde una determinada distancia, forma el conjunto de la imagen completa.
Cantidad de pixeles en las imágenes
Si la cantidad de pixeles que conforman una imagen son pocos, y el tamaño en centímetros de la misma es grande, la definición de la imagen expuesta será pobre, mientras que a mayor número de ellos, la imagen se visualizará mejor, permitiéndole contar con un grado de detalle superior, tanto en los contornos como en el cuerpo de la imagen.
La cantidad de pixeles de una imagen determina el tamaño en bytes que la misma tendrá, es decir que mientras más píxeles posea una imagen, mayor espacio ocupará en el disco duro de nuestra computadora, y por lo tanto, más difícil de manipular será.
El número de bits que se utilizan para representar cada pixel determina precisamente cuántos colores o gamas de gris pueden ser visualizados. Por ejemplo, en modo color de 8-bits, el monitor en color utiliza 8 bits para cada pixel, lo que le permite mostrar 2 elevado a 8, es decir 256 colores diferentes o gamas de gris.
En este punto, es necesario entender que en la tecnología de los monitores de color, cada pixel está compuesto por tres puntos diferentes: uno de color rojo, uno de color azul, y el otro de color verde, los tres puntos de color convergiendo al mismo tiempo en el mismo lugar, sin embargo, la tecnología no es perfecta, y los monitores tienen un grado de error al momento de converger sobre este punto, lo que puede hacer que los mismos parezcan borrosos.
Cabe destacar que un megapíxel equivale a un millón de píxeles, siendo el primer término el utilizado hoy en día para especificar la resolución y la calidad de una cámara digital.
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